martes, 20 de noviembre de 2012

Golosinas de otros tiempos 1ª parte

  Cada vez que entro en alguna tienda de "chuches"de las de ahora a comprar golosinas con mis hijos ,no puedo evitar comparar la tranquilidad que dispongo a  la hora de hacer acopio de guarrerías (si,si..guarrerías,así es como las llamamos en nuestra época..."chuches"es un termino demasiado moderno)...con la ansiedad que provocaba comprarlas en mi niñez.Me entra la risa tonta al recordar la angustia que pasaba cuando era pequeño yendo a los frutos secos a comprar golosinas.En tiempo record debías gastar cincuenta pesetas de forma inteligente y concisa,sin repetir pieza y lidiando con el desagradable tendero a ritmo de : ¡venga!,¡vamos!, ¡que mas!..venga joder que es pa'hoy!!!...a la vez que era observado  por los elementos que esperaban impacientes detrás para comprar!!!
 Ahora no,ahora vas tranquilamente,coges tu bolsíta, eliges con todo el tiempo del mundo,con variedad y cantidad abundante,pagas y te vas...sin estress, vaya!!

  Los establecimientos para abastecerse de guarrerías en mi niñez,eran de lo mas variado....panaderías bares,tiendas de frutos secos,kioscos....y estancos.En el estanco precisamente es donde empezaré mi personal  recorrido chucheril ,ya que aquí es donde empiezan mis primeros coquetéos con los dulces.
Esta etiqueta es todo un icono
  El viaje empieza con un clásico,el chupachups Kojak,(me gustaría saber si Telly Savallas sabrá que en España existe un chupachup con su personaje mas famoso).Lo mejor de los Kojak era el delicioso chicle fiesta que aguardaba en el interior...un dos por uno a módico precio!!Como en mi barrio nos entreteníamos con cualquier tontuna,si disponíamos de mechero,con el palo del chupachups nos currábamos el "cipote arrebañado"...que para dar misterio,no contaré de que se trata...si alguien lo sabe,le espero en los comentarios,ya que próximamente escribiré una entradita descojonante de este tipo de pasatiempos molones!!!
Paquetitos de cuatro canicas de sabores varios
  También en el estanco y al lado de los Kojak,estaba la caja de...¡las canicas de caramelo!....este producto,siceramente,solo lo compraba cuando no había otra alternativa.Los caramelos duros no han sido de mi agrado nunca,pero eran las cinco pesetas mejor invertidas,ya que uno de estos paquetes te duraba cerca de una hora y acababas con dolor de mandíbula cuando terminabas con la ultima canica.También servían de arma arrojadiza si comprabas dos paquetes!!!!!
Atención al sutíl aviso al juguetero
  Pero si hay un producto que hizo mis delicias,ese fue..el ¡¡¡¡Dulcerama!!!!!.El Dulcerama consistía en un panel de cartón que contenía chicles Cheiw,palotes,supositorios de regaliz y en cada uno traía una sorpresa diferente...un circuito de carreras,un puzzle,un parchis...entrar en el estanco y ver el expositor de Dulceramas era poco menos que una experiencia religiosa.Por cierto,poca gente se acuerda de semejante invento del diablo....
  Otra golosina que guardo en mi memoria con mucho cariño son los Capirotes.Cacahuete tostado recubierto de rosado caramelo crocanti y servido en bolsitas de diez unidades mas o menos.Si este maravilloso garrapiñado lo hubiera descubierto Isabel Preysler..sus fiestas habrían lucido mucho mas que con los Ferrero Roche.Las vendían en el kiosco de camino al colegio y creo que solo allí se podían conseguir.En ese kiosco era la única chuchería que podías comprar con un mínimo de seguridad sanitaria,ya que al estar embolsadas no entraban en contacto directo con los amputados dedos del individuo de dentro.Imaginad a un tipo con invalidez del doscientos por cien,en un reducido habitáculo,sentado en un maltrecho taburete sin apenas moverse durante cerca de catorce horas diarias donde come,caga y mea.... y no precisamente en este orden....si tienes cojones comete las gominólas que el prenda te despache!!!...nosotros lo hacíamos,de ahí nuestra tolerancia a muchas infecciones víricas modernas.


¿Quien no se ha hecho el mayor fumando Besontes?
  Pero las autoridades sanitarias tenían otros planes.Un mal estaba calando hondo en la chavalada y debían erradicarlo : ¡¡los cigarrillos de chocolate!!.Yo comprendí automáticamente su retirada del mercado,y no precisamente por los mismos motivos que ellos.Las autoridades advirtieron que los cigarrillos de chocolate inducirían a los mas pequeños a fumar tabaco en un futuro y les creara un habito dañino.Yo creo que no,   detrás de todo follón mediático creado, existía una razón de mas peso...¡¡¡el nefasto chocolate de los cigarrillos!!!!..un sucedáneo de cacao mas malo que el propio tabaco y que no había dios que lo comiera.


Un dinosaurio de las chuches
  En el Bar Juanito comprabamos los deliciosos Snype.Caramélos masticables de sabores frutales y que sinceramente todavía no he probado un caramelo con un sabor similar a día de hoy.El problema que acarrea el Snype como cualquier golosina masticable,es que te alicata las muelas de tal manera que tienes "paluegos" el resto del día.
Dulciora y dentistas:enemigos íntimos
  Hablando de masticables,¿quien no se acuerda del binomio formado por el Masky y Barrilete?El Barrilete tenía un sabor a fresa y nata espectacular y no era muy amigo de los premolares,el Masky lo mismo,y si encima te lo vendían pasado de fecha,era como comer un trozo de metacrilato...un peligroso cutter dentro de tu boca!!!.Si no recuerdo mal lo sacaron con sabor a coca-cola y la verdad es que era una golosina "hard".Después de su ingesta se te quedaban unos maxilares como los Bull-dogs.Un clásico.


Los Chimos.Una publicidad digna de Chanel
  Mas tarde llegó un caramelo que barrió.Los Chimos.Con una campaña publicitaria machacóna nos incitaban a todas horas a degustar el único caramelo fabricado con zumo de frutas natural.Con un alegre y colorido paquete,los Chimos te acompañaban durante las largas tardes de juegos,dosificandolos desde el bolsillo.Todo era placentero cuando te lo metías en la boca y comenzabas a sacarle el jugo....hasta que debido al roce del caramelo entre la lengua y el paladar, transformabas el delicioso aro dulce, en una peligrosa arandela de filo cortante que te jugaba malas pasadas si lo tragabas.Pero aunque te cortases el gaznate,tomabas otro y a seguir.Los Chimos nos enseñaron que es bueno el perdón.

En la siguiente entrega volveré con la segunda parte de este maravilloso mundo de chucherias,en un especial Chicles que seguro os encantará.